Eva Fàbregas concibe la relación con el arte a través de la experiencia sensorial. Sus esculturas, realizadas con materiales blandos y etéreos, como la tela y el aire, a menudo incluyen sonidos y nos invitan a acercarnos a través de los sentidos, a descubrirlas mediante el tacto, generando una intimidad que deje fluir los afectos.
Las formas de la serie Growths evocan organismos vivos —plantas, animales o incluso órganos humanos que se expanden en el espacio, a veces como una amenaza—, incorporando en la experiencia de la obra artística una nueva percepción de la arquitectura.
La artista aborda en su trabajo la erótica del objeto de consumo, la cultura del bienestar y la relajación, el psicodrama y la industria del marketing, así como las subculturas terapéuticas en las redes sociales.
En Growths, Fábregas nos invita a reflexionar sobre conceptos opuestos como fragilidad y fuerza, crecimiento y decadencia, sensualidad y monstruosidad...