En esta ocasión, Colección VI partió de la idea del arte como forma de aproximarse a la realidad, como lugar en que se mira de manera crítica el pasado para entender el presente e imaginar el futuro. Las obras de esta exposición propusieron viajes de ida y vuelta por sucesos que acontecieron en la historia, abordándolos desde las emociones, individuales y colectivas, e insistiendo en la dimensión sensible del arte.